jueves, junio 25, 2009

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...La noche siguió al día, como el flan mixto sigue a la ternera al horno con papas...
-Che, estaba buena la carne, eh?.
-Si, tan buena como el flan...-Fernando engullía con un arte comparable al de los bárbaros pre cristianos: la cuchara apuñalaba siempre en el mismo orden: dulce, crema, flan, y adentro...
-Che, aflojale al flan que te vas a atragantar...
-Mmmh!...- Eso había sido una respuesta... seguro...
Fernando aplicaba su filosofía de vida al pie de la letra: no se debe perder el tiempo, ni el dinero, mas que en aprovechar el tiempo y el dinero...Pero cada cual es lo que puede ser. Y a el le salía “bárbaro”. Ni la niebla, ni la curvatura del plato de postre podrían contra su decisión de llegar antes. A eso se resume: a llegar antes (¿pero, antes de que? ¿a dónde?). Llegar podía significar muchas diferentes cosas según la situación: desde ser el primero en la cola del cine (mayor posibilidad de elección), hasta conseguir completar una hora mas de viaje y parar en medio de la nada a dormir unas horas...
- Anda joya la chata...
- Mhm!...
- Nano, si no querés respirar vos... ¡Por lo menos dale un respiro a la cuchara!
- Mdale, Juan :¿Te molesta verme comer...? No me mires.
Listo. Filosofía barata y rápida. ¿Pero al fin y al cabo que me tengo que andar fijando?
Hasta aquí el viaje había sido entretenido: las rayitas de la ruta se veían bastante bien en la niebla (lastima haber perdido la cuenta en la nº 1.437). Fernando había hablado 3 veces: -“¡Cebate unos mates!”, “No lo llenes tanto que se va a volcar...”, “Gracias...”.-. Desde el cruce de Etcheverry, hasta Casteli, el paisaje había sido igual de blanco al frente y a los costados de la Ford roja (Una camioneta casi 0km, con caja de transporte de sustancias alimenticias plateada con vivos rojos y azules que imitaban rayos, la cual muchas veces provoco el detenimiento tan tramposo como errado por parte de inspectores de transito inútilmente convencidos de que “ sa! , se nos dio: un furgón pollero...”.). Algún camión de ida o de vuelta lo había interrumpido, ayudando a recobrar nuestra atención o mejor dicho nuestra alerta. El susto grande fue el peaje: Casi pasamos con barrera y todo...
-Mirá que se come bien en Minotauro ...
-Sep,... yo paro seguido acá. Es barato y rápido-. Ahí... la Nanosofía ...

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